17/5/08

Hábitos: si son malos ¿Cómo superarlos?


Dando en el blanco con la verdad

Blanco #1. El propósito de Dios es que refleje el carácter de Cristo. (Romanos 8:29)
-“Quiero ser el mejor representante de Cristo que pueda”.
-“Me rendiré a su control y haré lo que es mejor para mi cuerpo”.

Blanco #2. La prioridad de Dios para mi vida es cambiar mi forma de pensar. (Romanos 12:2)
-“No hay nada difícil para Dios. Yo puedo cambiar con su fortaleza”.
-“Reemplazaré mi forma de pensar equivocada con las promesas de victoria de Dios”.

Blanco #3. El plan de Dios para mí es que confíe en el poder de Cristo para cambiarme. (Filipenses 4:13)
-“Puedo dar mayor control de mi vida a Cristo para que gradualmente… llevé conmigo un número limitado de cigarrillos y vaya cambiando la frecuencia con que fumo permitiendo que otra persona me pida cuentas

“¿Cómo saber si tengo un hábito destructivo o una adicción escondida que va contra la voluntad de Dios?”

Procure presentarse diariamente ante Dios para rendirle cuentas y analice sinceramente su vida. Pregúntese si tiene algún hábito o deseo que le haga contestar sí a las siguientes preguntas:

La lista de comprobación para compulsivos:

-¿Están mis pensamientos centrados en mi mal hábito?
-¿Mi horario gira alrededor de él?
-¿Está en riesgo mi salud por él?
-¿Aumenta mi culpabilidad por ello?
-¿Se han afectado mis finanzas por él?
-¿Soy agresivo cuando me preguntan acerca de mi hábito?
-¿Se están afectando mis relaciones por él?
-¿Me enojo cuando no puedo practicarlo?

“Examíname, oh Dios, y conoce mi corazón; pruébame y conoce mis pensamientos; y ve si hay en mí camino de perversidad, y guíame en el camino eterno”. (Salmos 139:23–24)

El problema de los hábitos

Gracias a todos los libros que existen acerca de este tema, todos sabemos que un hábito puede hacernos o deshacernos. Los malos hábitos pueden provocar grandes males en su vida, mientras que los buenos pueden hacerlo más efectivo y exitoso. Pero como todos también sabemos, los malos hábitos son muy difíciles de dejar y los buenos difíciles de sostener. ¿Cómo los maneja usted?

“Sino vestíos del Señor Jesucristo, y no proveáis para los deseos de la carne”. (Romanos 13:14)

“Nadie nace con sus hábitos. Cada quien los teje en su vida y se los pone. Sus hábitos pueden ser los harapos de las adicciones egoístas o la vestidura del dominio propio Cristocéntrico”.

16/5/08

Hábitos (del mundo o de nueva criatura)

La bella o la bestia

Un perro pastor alemán puede entrenarse como un feroz cómplice con fines malévolos. Pero el mismo inteligente canino también puede entrenarse para ser un fiel compañero de quienes han perdido la vista. Esto se llama comportamiento aprendido. De la misma manera, los hábitos son comportamientos aprendidos que se convierten en una poderosa fuerza en nuestra vida, ya sea para bien o para mal. Los hábitos pueden centrarse en Cristo o en nuestro egoísmo, pueden ser virtudes o vicios, una belleza o una bestia en potencia.

Todos los hábitos son…

Habituales —se hacen con regularidad
Automáticos—se hacen sin pensar
Basados en la conducta—reflejan lo que hay dentro de nosotros
Intensos—crecen y se profundizan más
Tenaces—persistentes y difíciles de cambiar
Ocasionan un cierto grado de placer, satisfacen

“Ningún siervo puede servir a dos señores; porque o aborrecerá al uno y amará al otro, o estimará al uno y menospreciará al otro. No podéis servir a Dios y a las riquezas”. (Lucas 16:13)

Versículo clave para memorizar

“Todo lo puedo en Cristo que me fortalece” (Filipenses 4:13)
Pasaje clave para leer y meditar
1 Corintios 6:9–20

Pasos para el dominio propio

-Empiece haciendo un compromiso con Dios. (Deuteronomio 32:4)
-Sepárese del pecado. (Romanos 6:1–2)
-Ponga nuevas metas. (2 Corintios 5:9–10)
-Apoyase y vive en la verdad de quien eres en Cristo. (Romanos 6:6)
-Sustituya sus pensamientos por los de Dios. (Romanos 12:1–2)
-Someta su voluntad a Dios. (Romanos 6:19)
-Procura vivir en el poder de Cristo. (Romanos 5:1–2)

“Mas el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, mansedumbre, templanza; contra tales cosas no hay ley. Pero los que son de Cristo han crucificado la carne con sus pasiones y deseos”. (Gálatas 5:22-24)

Cómo cosechar buenos hábitos

Siembre la semilla de la moralidad. (Salmos 119:11)
-Mida todo su comportamiento con la medida de las Escrituras.

Siembre la semilla de rendir cuentas. (Proverbios 28:13)
-Diario o semanalmente, hable con un amigo que le ayude a dejar el mal hábito.

Siembre la semilla de gratitud. (1 Tesalonicenses 5:16–18)
-Lleve un diario de oración y agradezca a Dios las oraciones contestadas.

Siembre la semilla del perdón. (Mateo 6:14–15)
-Recuerde constantemente las muchas veces que Dios le ha perdonado.

Siembre la semilla del desinterés. (Filipenses 2:3)
-Pida a Dios que le muestre cuando actúa egoístamente.

Siembre la semilla de la comunión con Dios. (Salmos 104:34)
-Procure tener un tiempo diario a solas con Dios.

“Sembrad para vosotros en justicia, segad para vosotros en misericordia; haced para vosotros barbecho; porque es el tiempo de buscar a Jehová, hasta que venga y os enseñe justicia”. (Oseas 10:12)

15/5/08

Después de la caída..... (4ta parte)

Derrote al mundo por medio de la fe

  • Ponga sus ojos en Jesús, el Hijo de Dios. (Juan 1:1–3, 14)
  • Recuerde que Jesús ha vencido al mundo. (Juan 16:33)
  • Identifíquese con Jesús y recuerde que su victoria es suya también. (1 Juan 4:4)
  • Crea en la verdad absoluta de la palabra de Dios. (2 Timoteo 3:16)
  • Utilice la palabra de Dios como vara para medir los parámetros del mundo. (Salmos 119:11)

“Porque todo lo que es nacido de Dios vence al mundo; y esta es la victoria que ha vencido al mundo, nuestra fe. ¿Quién es el que vence al mundo, sino el que cree que Jesús es el Hijo de Dios?” (1 Juan 5:4-5)

Mis pensamientos me derrotan constantemente. ¿Cómo puedo vencerlos?”

Primero, es necesario que reconozca que Satanás es el “padre de la mentira” y se deleita en derrotarlo. Lea el libro de Filipenses. Tome nota de cada pensamiento de derrota que lo asalte y escriba un buen pensamiento para reemplazarlo. Entonces, cada vez que llegue a su mente cualquier idea que no esté de acuerdo con lo que dice Filipenses 4:6-8, ¡cámbiela!

Cuando identifique un mal pensamiento, diga: “Con el poder de Cristo, rechazo este pensamiento. La verdad es... (Pronuncie lo verdadero)”.

“Por lo demás, hermanos, todo lo que es verdadero, todo lo honesto, todo lo justo, todo lo puro, todo lo amable, todo lo que es de buen nombre; si hay virtud alguna, si algo digno de alabanza, en esto pensad”. (Filipenses 4:8)

“ Si Dios sabe que nuestra carne es débil ¿por qué nos tienta a pecar?”

Dios no es el autor de la tentación. Pecamos cuando en vez de alejarnos de inmediato de la tentación, seguimos los deseos de nuestra carne.

“Cuando alguno es tentado, no diga que es tentado de parte de Dios; porque Dios no puede ser tentado por el mal, ni él tienta a nadie; sino que cada uno es tentado, cuando de su propia concupiscencia es atraído y seducido”. (Santiago 1:13-14)

La importancia de conocer al enemigo

Ningún otro hombre fue objeto de tanto respeto y admiración como el genio militar George S. Patton. Su papel como general durante la Segunda Guerra Mundial sin duda fue protagónico. Asimismo, no hubo enemigo más temido que el mariscal de campo alemán Erwin Rommel, cuyas tácticas astutas de guerra le ganaron el sobrenombre de Zorro del Desierto. El éxito de Rommel en el desierto implacable de África del Norte era del dominio público. Aún así, Patton lo condujo hasta la emboscada que llevaría a la derrota a las tropas alemanas. Patton resultó ser más astuto que el zorro y logró cambiar el curso de la guerra para obtener la victoria de los aliados sobre Alemania.

¿Qué fue lo que ayudó a Patton a derrotar tan contundentemente a su enemigo? Cuando se le hizo esa pregunta en una entrevista, Patton se dirigió directamente a Rommel, y dijo: “Conozco su libro”. Patton había estudiado las tácticas de su enemigo. De la misma manera, los creyentes deben conocer el Libro de libros. A medida que estudie la Biblia, irá aprendiendo las estrategias que utilizan Satanás y sus huestes espirituales de maldad, nuestros enemigos invisibles.

“Porque no tenemos lucha contra sangre y carne, sino contra principados, contra potestades, contra los gobernadores de las tinieblas de este siglo, contra huestes espirituales de maldad en las regiones celestes”. (Efesios 6:12)

14/5/08

Después de la caída..... (3ra parte)

La estrategia de Dios para la batalla

Dependa del poder de Dios para vencer—Efesios 6:10
Ore pidiendo que Dios le ayude a vencer el temor y el desánimo.
Ore pidiendo que Dios le dé sabiduría y discernimiento.

Identifique a su enemigo—Efesios 6:11-12
Las organizaciones políticas y religiosas no son sus enemigos.
Satanás y los espíritus demoníacos son sus enemigos reales.

Prepárese para la batalla poniéndose toda la armadura de Dios—Efesios 6:13-17
Vístase con el cinturón de la verdad para combatir las mentiras de Satanás.
Vístase con la coraza de justicia para vencer la tentación.
Use el calzado del apresto del evangelio de la paz, sabiendo que Dios está de su lado.
Tome el escudo de la fe para hacer frente a la duda y falta de fe.
Tome el yelmo de la salvación para proteger su mente.
Utilice adecuadamente la espada del Espíritu.

Haga oración siempre—Efesios 6:18.
Comprométase a llevar cada detalle a Dios en oración.

“Estas cosas os he hablado para que en mí tengáis paz. En el mundo tendréis aflicción; pero confiad, yo he vencido al mundo”. (Juan 16:33)

13/5/08

Después de la caída..... (2da parte)

Derrote a la carne

Reconozca la guerra que se libra entre el Espíritu Santo y sus hábitos pecaminosos. (Salmos 51:5)

Acepte que la muerte de Cristo en la cruz fue por nosotros y que por ella hizo morir la naturaleza pecaminosa que hay en nosotros. (Romanos 6:6–7)

Recuerde que tiene el “poder de la resurrección” de Cristo morando en su vida para librarlo del poder que el pecado tiene sobre usted. (Romanos 6:4)

Agradezca a Dios que le ha dado una nueva naturaleza. (2 Pedro 1:4)

Asegúrese de que es una nueva criatura en Cristo. (2 Corintios 5:17)

Acuda a Cristo que vive en usted para lograr la victoria sobre sus hábitos egoístas. (Filipenses 4:13)

“Pero los que son de Cristo han crucificado la carne con sus pasiones y deseos”. (Gálatas 5:24)

Después de la caída.....

INTRODUCCIÓN

Nuestra naturaleza humana a veces gana terreno cuando no estamos bien cimentados sobre la roca que es Cristo Jesús.

Cuando esto sucede, estamos más susceptibles a los hacechos del enemigo, a esto, si le sumamos nuestras concupiscencias y esta inestabilidad espiritual seremos blancos fáciles.... esto me pasó, caí y me sentí totalmente desesperado, pensé que si moría en ese mismo momento ardería en el infierno, dando gracias al Altísimo y por su Espíritu Santo que redarguyó mi corazón pedi perdón de una manera sincera y busqué consejo sano en alguien con mayor conocimiento en la escritura, les voy a compartir lo que este siervo del Señor me envió por correo, sé que de pronto alguien puede estar pasando una crisis similar y le puede servir de mucho apoyo.

La Guerra Espiritual

Resista a Satanás

El saber que el poder y conocimiento de Satanás son limitados nos da valor para resistirlo.

Satanás no es omnipotente. Satanás es poderoso, pero no es todopoderoso. (1 Juan 4:4)

Satanás no es omnipresente. Satanás es un ángel caído, y los ángeles no pueden estar en todas partes al mismo tiempo. (Job 1:7)

Satanás no es omnisciente. A Satanás se le llama “ángel de luz”. Es astuto, maquiavélico y muy listo, pero el pecado ha corrompido a tal grado su sabiduría, que todavía intenta derrotar a Dios. (Ezequiel 28:17)

Satanás está limitado. Es importante saber que Dios permite la actividad del enemigo en nuestra vida para fortalecernos y purificarnos. (Job 1:12)

Satanás no puede tolerar la oposición. Usted puede resistir sus ataques permaneciendo firme en su posición en Cristo. (Santiago 4:7)

Satanás odia la sangre de Cristo. Si usted es cristiano, Cristo ya conquistó a Satanás y usted también es un vencedor. (Apocalipsis 12:11)

“Por tanto, tomad toda la armadura de Dios, para que podáis resistir en el día malo, y habiendo acabado todo, estar firmes”. (Efesios 6:13)

Versículo clave para memorizar

“Hijitos, vosotros sois de Dios, y los habéis vencido; porque mayor es el que está en vosotros, que el que está en el mundo”. (1 Juan 4:4)

Pasaje clave para leer y meditar

Efesios 6:10–18

8/5/08

El carácter del creyente


"El verdadero carácter del creyente se manifiesta cuando el creyente está solo. ¿Cómo es su conducta cuando está solo? ¿Hace cosas incorrectas cuando nadie lo ve, o cuando no hay ningún conocido a su alrededor?"